Una
pertinaz y molesta lluvia que cayó sobre la ciudad durante la tarde y noche del
día 23 de junio de 1931, no logró
deslucir la primera Noche de San Juan de la estrenada II República Española que dos meses antes se
había encontrado con el poder tirado en medio de la calle por la huida inaudita
del Rey Alfonso XIII, representante de
la secular monarquía española.
Numerosas
hogueras alumbraron el cielo coruñés y varias
rondas, murgas y coros dieron color y gran
ambiente musical a numerosas calles que estuvieron muy concurridas. Se
registraron a lo largo de tan singular
noche numerosas borracheras y hubo que atender a varios heridos y contusionados.
Todos ellos fueron asistidos en la Casa de Socorro, destacando por su importancia las heridas sufridas
por una vecina de la calle de Caballeros, Luisa García, que se quemó en ambas
piernas. Otro joven, este vecino de la calle Orillamar, Bienvenido González,
sufrió fractura de peroné y luxación de tibia de la pierna derecha al caer en el justo momento que saltaba una
gran hoguera muy cerca del cementerio de San Amaro. Otros tres percances de importancia sucedieron en las calles de
Vera, Campo de Artillería y Juan Florez,
donde fueron atendidos respectivamente Agustina Mantiñán con luxación de tibia,
Rosa Méndez con importantes quemaduras en cara y brazos así como Antonio
Taracido, con un profuso corte en la
mano derecha.
Las
calles del Orzán, Cordelería al igual que la de
Rubine amenizaron sus respectivas
hogueras con lanzamiento de cohetes. Los
vecinos de la calle del Campo de
Artillería y rúas adyacentes,
organizaron en honor al Santo Precursor,
diversas actividades alrededor de las consabidas hogueras, con música de
organillo, de gaitas, concursos y disparo de numerosas bombas de palenque. Por su parte el Sporting club también cumplió
con el ritual del fuego en su parque de Juan Florez, el popular “Leirón”, que
estaba profusamente engalanado de farolillos y bombillas, donde acogió una animada y muy concurrida verbena,
amenizada por una selecta orquesta. Los
socios del Náutico llenaron los salones de la entidad marítima para participar
en la quema de su hoguera y en un
divertido baile. Por su parte La Coral “Follas Novas” participó en el baile
organizado en el parque Damm que duró hasta altas horas de la madrugada. Fue
sin lugar a dudas una noche de alegría.
Calín Fernández Barallobre