domingo, 31 de diciembre de 2017

MI mágica Noche de Reyes.

Adoración de los Reye Magos
Si lugar a dudas la noche más mágica en el año, es la noche de los Reyes Magos de Oriente. Sobre todo para los niños que esperan con deseo y profunda ilusión la llegada de esos tres imponentes personajes Melchor, Gaspar y Baltasar que en su día tuvieron la feliz ocurrencia, guiados por una estrella, de allegarse hasta un humilde portal de una ciudad de Israel llamada Belén, donde, entre pajas y humildad,  había nacido un Niño que vendría a ser la Luz y la Salvación del mundo entero con su mensaje de Amor, Fe, Esperanza y Caridad  y ofrecerle Oro como regalo dedicado a un Rey, Incienso por el carácter Divino de Jesús  y Mirra con lo que se demostraba la condición humana de  Jesús que tendría que morir, pero en este caso resucitar al tercer día para redimirnos del pecado  a todo los mortales. 

Siempre que llega esa noche mágica vienen a mi memoria recuerdos inolvidables de infancia que han quedado marcados de forma indeleble en mi mente, alma y corazón, Por ejemplo la escritura de la carta a los Magos me producía un sentimiento de gran nerviosismo, pues en aquél bonito papel iban mis sueños infantiles reflejados en peticiones de juguetes que ya veíamos en la publicidad de la televisión como el coche Tiburón Citroen Payá que fue el primer juguete que se anunció en el medio televisivo.

El autor junto a su hermano, visitando a uno
de los Reyes Magos
Otro emocionante momento era la obligada visita a esos queridos  Reyes Magos cuyos tronos estaban situados en el edificio de  la Terraza del Relleno. Allí escuadristas de la Organización Juvenil Española,  perfectamente uniformados, daban guardia de honor a sus Majestades que  atendían solícitos las peticiones de los niños. A mí me encantaba el rey amarillo que se me parecía enormemente a Emilio López, un jefe de centuria de O.J.E que había trabajado en el comercio de nuestro padre Marcelino y que para mi hermano Cheche y para mí fue como un hermano mayor. Lamentablemente Emilio nos dejó para siempre en 1979 víctima de un accidente de coche acecido en la  tierra zamorana de Benavente.

La tarde-noche de Reyes era muy especial. Primero acudíamos a presenciar la cabalgata y de seguido hacia casa para cenar y  dormir, no sin antes dejar tres copitas de anís o brandy, un poco de turrón,  unos cuencos con agua para los camellos y los zapatos bien lustrosos. ¡Qué maravillosa ingenuidad! Todos los ruidos despertaban en nosotros curiosidad. Pensábamos que los Reyes estaban haciendo su denodado trabajo de ir casa por casa entregando presentes y juguetes a todos los niños del mundo.

Al día siguiente la gran explosión de júbilo. Los múltiples regalos en el cuarto de estar a los pies del árbol y de la televisión. Y el gran roscón de Reyes que nos endulzaba ¡y de qué manera! el paladar.

Circo igual al de la foto fue uno de mis juguetes preferidos 
Recuerdo con enorme cariño y nostalgia aquellos regalos de Reyes, por ejemplo un circo que tuve durante muchos años con innumerables figuras que componían todo el elenco. Desde payasos a la banda de Música, pasando por trapecistas, domadores, el forzudo, ecuyeres e innumerables animales y fieras.  Se vendían en cajas y unitariamente y venían en unos sobres de la marca Jecsan. Llegue a tener una gran colección pues durante el año mis padres o mi primo Carlos Torres me compraban numerosos sobres en la juguetería Estrada de la Rúa Nueva. Soldados españoles, yanquis, sudistas, indios, vaqueros, alemanes, norteamericanos, ingleses, japoneses, de la guerra de la independencia española, romanos, hunos, cruzados, el capitán Trueno y sus amigos; el Jabato; el Cosaco Verde. Me encantaba hacer desfiles y batallas. 

Figuras de circo de JECSAN
Camiones, pistolas, un fuerte del oeste. Heredé de mi hermano Cheche el puente sobre el río Kwai, una réplica en madera del famoso puente que inmortalizó  la película interpretada por Alec Guinness y William Holden. Nuestro primo Carlos Torres nos trajo durante unos años unos muñecos a pilas. Creo que los había comprado en Norteamérica. Un monito que tocaba una guitarra, un sheriff con sus pistolas y un barman que agitaba una coctelera y echaba humo por las orejas después de llevarse la copa a la boca. Eran una pasada de muñecos pues había muy pocos de esas características por  aquellas fechas en España. 

Baloncesto Exin 
Un futbolín, una pista de hockey hielo y el Exin Básquet fueron también otros de mis juguetes preferidos al igual que el scalextric, un tren Paya, el Monopoly, los juegos reunidos Jeiper y por supuesto los balones de fútbol. Que tremendos partidos jugados en todo los rincones del barrio, sobre todo en la Plaza del Maestro Mateo, en paseo de Ronda y en los Puentes.

El día que me enteré de que los Reyes Magos eran los padres sufrí una gran desilusión pero pronto me recuperé al pensar que la ilusión es un estado del alma y que de ilusión y fantasía también se vive. O si no que es en suma la mágica noche de San Juan, a la que he dedicado mis esfuerzos, sino un mundo de fantasía e ilusión que solamente se puede contemplar con los ojos del corazón.

Mi querida madre María  fue una gran animadora de las Navidades. Nos inculcó tanto a mi hermano como a mí el verdadero sentido de la Navidad y gracias a Dios hoy seguimos conservándolo. Por ejemplo aun antes de acostarme ese día, dejó en el salón de mi casa los paquetes de regalos dedicados a mi hermano, cuñada, sobrino y los propios para  que a  la mañana siguiente levantarme y verlos con inusitada alegría.

Lamentablemente hay niños que no celebran
la festividad de los Reyes Magos.
Pero esa noche también el corazón se nos conmueve y se arruga el alma   al saber que miles y miles de niños que esta noche no pondrán sus zapatitos porque sencillamente no los tienen, porque sus pies caminan descalzos sobre la tierra. No  pedirán ni un tren ni una muñeca, ni juegos de mesa, sino un trozo de pan para llevarse a la boca como único sustento en  esa noche mágica de Reyes. Ellos también serán premiados en su momento pues Dios nunca olvida  a sus criaturas. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.

Reyes Magos: Ilusión y Esperanza.
Los Reyes Magos son como la Vida misma, pues a pesar de nuestros deseos, casi nunca traen lo que pedimos, pero tanto Melchor, Gaspar como Baltasar esperan de nosotros que mantengamos la ilusión y la esperanza, además de la magia que siempre posee nuestra vida. No perder nunca la ilusión, ni las ganas de seguir viviendo con magia nuestra vida, Feliz Noche de Reyes.


Calin Fernández Barallobre.